TRANQUILO!!!
Existen momentos en nuestras vidas que necesitamos más que una palabra de esperanza y consuelo que nos dice: que todo estará bien, o que lo mejor está por venir. Hay momento en que eso no es suficiente y urgentemente requerimos sentir  en el instante un momento de paz y seguridad. Algo que calme y apague lo que está  causando un volcán en nuestro interior. Algo que calle al problema, a la dificultad, a la soledad, al rechazo, a la culpa y al dolor.
Es en esos momentos que debemos acudir al mejor recurso, y que realmente es más que una espera, es una realidad. “ORACION”
La Biblia cita un suceso que te abrirá los ojos.
Lucas 22: 41-43,
(Jesús) Y se apartó de ellos como a un tiro de piedra, y poniéndose de rodillas, oraba, diciendo: Padre, si es tu voluntad, aparta de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya. Entonces se le apareció un ángel del cielo, fortaleciéndole.
Jesús se sentía mucho peor que tú, pero él sabía, lo que tú no debes olvidar. Que no estas solos, y que en esos momentos que crees que no puedes más, Dios está ahí para fortalecerte. No te estoy diciendo que el problema va a desaparecer, te estoy diciendo que Dios no te dejará solo en el proceso. Que El será tu fuerza y que recibirás lo necesario para salir victorioso. A Jesús se le envió un ángel para fortalecerlo, pero ahora tú tienes mayor privilegio. Jesús mismo por medio de su Espíritu está contigo.
Debes cambiar tu punto de vista. El problema no es grande. Grande es Dios. ¡Míralo! Detente unos segundos. Míralo en
aquellos que te aman, que se preocupan por ti. Y si aun así no lo ves. Míralo ahora expresándote estas palabras y recordándote su gran amor.
No concentres tu atención en la dificultad, pon tu atención en Dios. Está en todo lugar. Está ahí a tu lado.
Con amor

Judith Girón

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