Semilla 32
¡Mujer imposible!

(Lucas 1:37)

Porque nada hay imposible para Dios.


Frase del día: “Dios pone donde no hay, y quita lo que sobra” 

“E
sta grabación se autodestruirá en cinco segundos” frase muy conocida por la odisea de cuatro películas llamadas “Misión Imposible” protagonizadas por el actor Tom Cruise, y dirigida por Brian de Palma. 
     Al referirme a esta expresión, mi mente se va a esas ocasiones en que la situación exasperante te hacen decir: ¡esta mujer se autodestruirá en cinco segundos! y no importando el grandioso momento, la experiencia hermosa o las bendiciones del día, por alguna pequeñez o gigantez, todo se echa a perder.
      Es probable que te identifiques con esto, y  esa actitud que tomas al ver un zapato tirado, ropa mal puesta, toalla húmeda enrollada, en fin, cualquier desorden en tu ordenado imperio que hace que tu cerebro estalle y mandes a la historia tu gozo, convirtiéndote así en una mujer imposible de contentar.
       Se ha dicho muchos comentarios con intenciones sarcásticas sobre lo difícil que es mantener a una mujer feliz. Lo último que escuché decir al respecto fue que: “genéticamente la mujer es incapaz de disfrutar en todos los sentidos lo que tiene”. ¡Uf qué barbaridad! Todas sabemos que eso no es real, pero cómo desmentirlo cuando nuestra manera de ser afirma con una gran falta de indulgencia esos comentarios espantosos.  
     ¡Escucha esto mujer! Es importante que comiences a ver y a apreciar las cualidades que tienen las personas que te rodean, para no solo centrarte en sus defectos. Es necesario que aprecies las cosas que posees, y no las que te faltan. Agradece lo que han hecho por ti, sin frustrarte por lo que aún no has recibido. De vez en cuando, baja de tus tacones para ponerte  en los zapatos de los demás.
      Dios no te está llamando a ser desorganizada, insensible y sin visión de progreso a causa del conformismo. Al contrario, Dios quiere que aprendas a disfrutar lo hermoso de la vida junto a las personas que ha puesto a tu lado. Es tu actitud lo que definirá tu gozo. No tienes que dejar de sonreír por ser decidida.  Ni ser quejumbrosa por ser dedicada.
      El texto de hoy es una incuestionable muestra de que no importa cómo seas o lo que te esté pasando, para Dios no hay nada imposible de realizar ni nadie  difícil de trasformar, cambiar o regenerar.
     En el trasfondo histórico del  texto vemos que Dios lo hizo con Elizabeth, dándole un hijo en su vejez aun siendo estéril.
      Dios es capaz de reformar tu vida, a fin de que tu brillo destelle más. Eres una joya de mujer. Dios te hizo irrepetible, por lo que no puedes permitir que el enojo opaque la luz de Jesús en ti.
      ¡Mujer! tienes que saber que la falta de gozo es un problema del corazón. Por eso, te invito una vez más a albergar amor en él, por montones, ya que necesitas que tu gozo encuentre alimento diario en Dios.
     Estás gestando gozo. Sonríe ante las circunstancias, y dile: ¡este problema que me roba el gozo hoy, se autodestruirá en cinco segundos! En el nombre de Jesús.

¡Es tu Turno!
Escribe en la tabla de tu corazón que:
“Nada opacará el brillo de mi gozo”

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