EL TRAJE MAS ELEGANTE DE UN
HOMBRE DE DIOS
Fructificando en: AMOR, GOZO y PAZ
1Timoteo 6:11-12
Es interesante ver como en este siglo, más que en
otros ya vivido, la industria de la moda se ha ocupado por el buen vestir de los
hombres. Lo menciono porque sabemos que eran mayormente las mujeres las que gustaban
de toda esta atención.
Un hombre limpio, oloroso, y bien vestido, hace la diferencia
en el círculo o lugar en que se encuentre. Pero para muchos, modelar un buen
traje de diseñador, es un asunto de ocasiones muy especiales y escasas, y para
otros, es una experiencia desconocida.
Y quiero tomar esta idea para hablar un poco del traje
más elegante que puede modelar un hombre de Dios.
El apóstol Pablo en la primera carta que le envía a Timoteo,
pastor de Éfeso, y uno de sus discípulos más querido, le insta a perseguir la moral
cristiana, dándole para ello recomendaciones éticas.
Timoteo al igual que los hombres de Dios de hoy, es la
representación de esos seguidores de Cristo, que no han tenido una relación directa,
visualmente hablando, con los hechos de Jesús. Y es por esto la importancia del mensaje dado en el capítulo 6, versos 11
al 14. Para que la falta de relación física con los hechos de Jesús, no superen
el encuentro y actual relación espiritual con la cruz de Jesús.
Pablo, guiado por el Espíritu, le escribe a Timoteo, y
a ti, hombre de Dios que me lees, que el mejor traje, y más elegante que puede
modelar un hombre lavado por la sangre de Cristo, es de manera colectiva,
portar: justicia, piedad, fe, AMOR, paciencia y mansedumbre.
La Biblia insta
a que el hombre de Dios no sea conducido por lo material o el amor al dinero,
como claramente dice 1Timoteo 6:10.
La ambición de obtener un puesto de trabajo, un logro,
una riqueza, un buen carro, lujos, y mucho dinero, no puede ocupar el corazón de
un hijo de Dios. Por el contrario, este debe
ser guiado por el Espíritu, pues si es el Espíritu que le guía, todas esas añadiduras
mencionadas, no le harán mover de su fundamento en Cristo Jesús. Por tanto, tendrás
dinero, y seguirás siendo justo. Tendrás un buen puesto laboral, y serás piadoso.
Alcanzarás tus metas, pero sabrás que solo es cuestión de fe. Obtendrás lujos,
y no dejarás de AMAR. Tendrás paciencia con otros, sabiendo que Dios ha tenido mucho
más contigo, y serás manso, no un pobre
pedante olvidado por la familia.
Sepa usted, HOMBRE DE DIOS, que es una batalla mantenerse
alineado por el Espíritu Santo, pero como Pablo le dijera a Timoteo, es una
BUENA BATALLA DE LA FE, que tiene su recompensa eterna. No te rindas, resiste y muestra tu mejor
traje. Modela a los que te rodean, las cualidades que porta un hombre de Dios. ¡Habla como un hombre de Dios. Actúa como un
hombre de Dios. Y vive como un hombre de Dios!
Sé que no eres Súper Man, pero Dios solo te ha pedido
que lleves tu cruz cada día, porque ya El llevó la del mundo entero.
Dobla tu voluntad para que sea la de Dios en ti. No son
tus fuerzas, son las de tu Padre en ti. Dios no te juzgará por tu pasada mala conducta.
Te juzgará, por una vez arrepentido, no comenzar a hacer su voluntad en el presente,
negando mostrar en tu actual y cotidiana vida, la verdadera moral cristiana.
Dios te bendiga. Con alto respeto, entrego esta
Palabra para todos aquellos hombres de Dios, que cada día luchan la Batalla de la
fe.
Pastora Judith Girón.
Dios te bendiga mucho Pastora Judith, escrito necesario en estos tiempos, ¿Cual es el verdadero valor de un hombre?. Necesitamos hombres de valor, portando el carácter de Cristo.
ResponderEliminarAmén, amen
ResponderEliminar