!MAS GELATINA! En días pasados al regresar a mi casa tras haber terminado una diligencia, encontré que mi hijo Joshua estaba muy triste. El niño al verme llegar, se acercó sin decir nada e inmediatamente noté que de sus pequeños ojitos salían dos lágrima s que corrían apresuradamente por sus mejillas. Con ternura lo tomé en mis brazos y pregunté el porqué de su congoja, a lo que la trabajadora doméstica me contestó que estaba así porque no había podido salir a jugar con sus amiguitos, debido a las instrucciones explicita que dejé de no dejarlo salir. Me conmovió tanto saber que aun teniendo la facilidad de desobedecer y salir a jugar, el niño prefirió quedarse en casa, que quise agasajarlo con algo. Con mucho entusiasmo le pregunté: - Que quiere el niño de mami que le haga?, sin perder tiempo y casi en seguida me contestó: - Gelatina. Tengo que decir que normalmente suelo ofrecerle gelatina porque sé que le encanta, pero ese día yo quería darle algo más, por lo que volví y l